La llamada gripe cetogénica o gripe keto es un grupo de síntomas que pueden aparecer de dos a siete días después de comenzar una dieta cetogénica. Cuando la gripe cetogénica suele aparecer, es posible que experimentes fatiga, tos, resfriado, dolor de cabeza, náuseas e irritabilidad.
No te preocupes: la gripe keto no es un virus real. Tu cuerpo simplemente se está acostumbrando a una dieta que ya no es rica en carbohidratos y alimentos procesados y que es baja en azúcar. Se reajustará para utilizar la grasa como combustible para obtener energía. Sin embargo, las personas que experimentan síntomas de la gripe keto a menudo se preocupan y vuelven a comer carbohidratos.
Si sientes los síntomas, espera unos días y esto pasará. Si no te agrada la idea de tener que experimentar la gripe cetogénica, intenta agregar más sodio y electrolitos a tu dieta. Además, mantente hidratado, duerme lo suficiente (alrededor de 7 a 9 horas) y come más grasas.
Estos son algunos alimentos que contienen electrolitos:
- Potasio: aguacates, nueces, verduras de hojas verdes oscuras (como espinacas y col rizada), salmón, yogur natural y champiñones.
- Magnesio: nueces, alcachofas, espinacas, pescado.
- Calcio: queso, verduras de hoja, brócoli, mariscos, almendras.
- Fósforo: carne, queso, nueces, semillas.
- Cloruro: la mayoría de verduras, aceitunas, sal, algas.